Semblanza de Alfredo Marino, autor de "El Ciruja"

Tino Rodriguez - Norberto Alfredo Marino

FILOSOFIA LUNFARDA, Tino Rodríguez.
ALFREDO MARINO

Me cuenta Norberto Alfredo Marino su hijo, que:
"Era un mozo bacán y arrogante/bien peinado al Coty y la Gomina/por el cual se trenzaban las minas... " Había nacido un 30 de enero en 1904 y ya desde muy joven, 14 años, le tiró la milonga y la noche. Estudió, a escondidas, la guitarra y se (largó pa´l centro), donde con distinta suerte cantó en varios lugares, hasta que, en dúo con Pablo Eduardo (Piraca)Gómez, llegaron a ser las primeras voces que cantaron en el palquito del café "El Nacional", cuando este aún estaba en el costado de la barra, fue eso a comienzos del año 1926.

Allí "roncaba" lo mejor del ambiente tanguero, con el fuelle del "Negro" De La Cruz, liderando su conjunto, allí el 12 de agosto de ese año, "Piraca", y no Marino, estrenó "El ciruja", escrito unos días antes y musicalizado por De la Cruz. Poco después de casarse, en 1927, dejó el canto para irse (1928) a San Juan a cubrir un importante cargo público. La chirinada del 30 lo desplazó, debiendo viajar a Europa en diciembre de ese año, para escapar a la represión fascista dirigida por Leopoldo Lugones. A su regreso en 1932, cantó en varios conjuntos (entre ellos el de Elvino Vardaro), acompañó en guitarra a Marambio Catán, hizo teatro con Canaro, López Lagar y otros grandes de la época. Luego recaló en Radio El Mundo, donde integró el elenco estable de radioteatro, que alternó desde entonces con temporadas teatrales.

En la Radio se jubiló y fue llamado en 1966 a dirigir la parte artística de la emisora, de donde salió un año más tarde en una purga de la dictadura de turno. Se dedicó entonces a la publicidad en Atacama, sorprendiendole la muerte el 21 de marzo de 1973, veintitantos días después del fallecimiento de Carlos Marambio Catán, fue uno de los tres panelistas de la Academia Porteña del Lunfardo, cuando a fines de 1972, se le homenajeó por "El ciruja". Fue actor, cantor, guitarrista, funcionario ejemplar. . . Pero por sobre todo eso, fue un hombre de acrisolada rectitud, buen marido, e insuperable como padre.

Nota del autor: "El Ciruja", tango de Alfredo Marino, es una joyita del lunfardo, donde hay una profusión muy grande de términos, pero impecablemente aplicados, logrado totalmente el ambiente de la obra y demostrando así, que el autor había "fatigado la yeca", embrocando, escuchando y captando su ruido.

FILOSOFIA LUNFARDA, Tino Rodríguez.

Translate